Regalos en forma de simples paseos y también de minivacaciones algo más ambiciosas, para pasajeros menores con ganas de grandes aventuras.Este año, el Día del Niño (el domingo próximo) cae cuando los adultos raspan el fondo de la paciencia y el presupuesto, si no han agotado ya ambos, luego de la cuarentena y las vacaciones…
Pero como este tipo de aniversarios asociados con el consumo se anuncian desde las vidrieras directamente al tímpano de los pequeños, no sería extraño que muy pronto nuestros hijos nos miren suplicando algún otro oneroso entretenimiento, ni que algún rastro de culpa en nuestra conciencia nos haga consentir el pedido.
¡Alto ahí! Antes de sacar la billetera por qué no pensar en un viaje, ya sea para realizar pronto o para planear, que es también una forma de empezar a disfrutar. Qué mejor regalo que una nueva experiencia donde, no importa la edad, todos nos sentimos en algún momento infantes dando los primeros pasos.
Para ofrecer un menú variado, la experiencia personal era escasa, así que apelamos a un sondeo entre padres para conocer sus experiencias.
Entre las respuestas hubo relatos de circuitos tradicionales, pero otros no tanto? Padres, niños, ajusten sus cinturones para su seguridad y, si es necesario, para empezar a ahorrar.
Los museos. Durante estos raros días en que se suspendieron los espectáculos, varios volvieron a museos no muy concurridos y encontraron momentos inesperados. El Museo de La Plata ($ 6, 115 Paseo del Bosque, La Plata; www.fcnym.unlp.edu.ar ) actualiza constantemente sus salas de antropología, etnografía y arqueología, y sigue siendo un hit. El Museo Participativo de las Ciencias, en la Recoleta de Buenos Aires ($ 12, Junín 1930, CABA, www.mpc.org.ar ) y el del Abasto (entre $ 10 y 20, Corrientes 3247, Nivel 2, www.museoabasto.org.ar ) están diseñados para los chicos, pero cualquier museo espacioso puede convertirse en un programa óptimo, al llevar lápices y papeles para dibujar lo que ven y elegir del amplio listado por cercanía o interés: www.museos.buenosaires.gov.ar (calendario actualizado de actividades); www.cultura.gov.ar (se puede descargar la guía de museos del país).
Hoteles. Muchos ofrecen un club infantil o actividades que mantienen a los pequeños felices, sin extrañar la ausencia de sus padres mientras éstos utilizan otros servicios más relajados y silenciosos del hospedaje, como el spa. Pero no todos los hoteles que enuncian este servicio pasan el filtro de la recomendación de un padre a otro. Entre los que anotan mejores puntajes están el Sheraton de Colonia (desde US$ 230 la habitación), Uruguay, y el de Río de Janeiro (desde US$ 215 la habitación, www.starwoodhotels.com ), el Club Med de Trancoso, Brasil (US$ 1800 por persona, la semana, todo incluido; www.clubmed.com ), y el Llao Llao, en Bariloche (desde US$ 280 la habitación, www.llaollao.com ). Los chicos son acompañados por personal especializado, con los que aprovechan el entorno, aprenden y se divierten.
El campo. Pasar uno o varios días en una estancia es siempre una experiencia interesante para los chicos, aunque sea por el hecho de interactuar con mamíferos de cuatro patas y ensanchar las fronteras de las corridas y la vista. Los tiempos del campo sincronizan perfectamente con los de las familias, con sus sobremesas y siestas (en las más simples, la estada diaria tiene un precio desde los 90 para adultos, con comida sin bebidas; en las más completas -en actividades e infraestructura-, los precios parten de los 150 por día, por adulto, con algunas actividades, comida y bebidas no alcohólicas; www.estanciasargentinas.com ; www.welcomeargentina.com/estancias ). Dentro de la variadísima oferta de estancias que ofrece nuestro país hay algunas que se han especializado en hacerse cargo -casi domesticar- de niños, como La Granadilla, en Córdoba ($ 240 por día por adulto, con todo incluido, menos bebidas, merienda y cabalgatas; www.lagranadilla.com.ar ). Otra opción es San Antonio de Areco que tiene, además de varios establecimientos rurales, la impronta de ser cuna de la tradición, por lo que el entorno completa la experiencia con un recorrido por el pintoresco pueblo y un cierre de antología en la Olla de Cobre, la chocolatería ( www.sanantoniodeareco.com ).
Naturaleza. Tire un dardo en cualquier lugar del país y donde caiga seguramente no le faltarán circuitos turísticos. Pero una sugerencia todavía no tan conocida es recorrer el lado este de los esteros del Iberá, donde está la laguna Iberá. La observación de las aves y el resto de su peculiar fauna atrajo primero a los naturalistas, por lo general adultos, y recién ahora está captando la atención y cierta cuota necesaria de silencio en el público menudo. Es un programa ideal para 3 o 4 días, acompañado por una guía de pájaros y plantas que quedará chica frente a semejante vergel (en el alojamiento, que incluye todas las comidas y algunas excursiones, los precios parten en los $ 300 por persona, por día; www.coloniapellegrini.gov.ar ).
Dejando de lado la nieve, que tiene su legión de profetas y feligreses, los circuitos que ofrece la Patagonia para rodar son casi ilimitados. Por ejemplo, el Camino de los Siete Lagos, de Angostura a Esquel, de Bariloche a Puerto Varas (la oferta de alojamiento se adapta a cualquier presupuesto. Una cabaña para albergar hasta 6 personas, no lujosa, pero sí amplia, bien ubicada y con todos los servicios cuesta entre 300 y 500 pesos por día, según la localidad www.interpatagonia.com ).
Ischigualasto y Talampaya, en San Juan y La Rioja, respectivamente, son destinos para ir en invierno y sus geografías parecen diseñadas por el trazo infantil de quien no se civilizó totalmente, como los chicos (una excursión desde Buenos Aires, en bus, de 8 días, con media pensión en La Rioja, aproximadamente $ 2000 pesos por persona; www.argentina.ar ).
Además del esquí de fondo (alquiler de equipo, por día, $ 50; pase diario, 12), Tierra del Fuego tiene amplias posibilidades de aventuras, siempre con el valor extra de hacerlo en el fin del mundo. Esto incluye desde pasear en trineos tirados por perros ($ 80 por persona, por circuito de 2 km), snowcats (120 por persona, el circuito de 6 km), patines de hielo (alquiler, 40 por día), raqueta (alquiler, 25 por hora) hasta en tren (tarifa ida y vuelta, adulto, 90; www.trendelfindelmundo.com.ar ).
Con mucha agua Se puede visitar a sus habitantes en San Clemente de Tuyú (pase adulto, $ 64, www.mundomarino.com.ar ) o, más ambicioso, viajar a Bahamas (desde US$ 1100 el aéreo), donde es posible nadar con delfines (excursión desde US$ 100 por persona; www.bahamas.com ; www.bahamasdiving.com ). Si no podemos llegar hasta los peces, podemos nadar como ellos: a partir de septiembre y hasta después de Semana Santa tenemos cerca Acuamanía, parque acuático de aguas termales en Salto, Uruguay (pase de 2 días, US$ 12,5, www.acuamania.com ). Son 15.000 metros cuadrados surcados por toboganes, piletas y juegos. Un poco más lejos, a 16 kilómetros de Fortaleza, en el estado brasileño de Ceará, está el Beach Park (pase de 3 días, US$ 54; www.beachpark.com.br ), con 170.000 metros cuadrados que contienen un centro de convenciones, un resort, departamentos y, la estrella, el parque acuático de 35.000 metros cuadrados, tan grande que podrían disfrutar sus juegos hasta 8000 personas al mismo tiempo. Allí está el tobogán más alto y veloz del mundo, y hasta una pileta con olas con el elocuente nombre de Maremoto.
Pero si de agua se trata, una grata sorpresa durante un viaje a Nueva York o Boston puede ser el zambullirse en la historia de la navegación en Mystic Seaport, museo de América y el Mar, entre ambas ciudades (a 160 kilómetros de Boston y 250 de Nueva York). No sólo alberga puertos y barcos, sino que reproduce una aldea costera del siglo XIX (admisión general, adultos, US$ 24; www.mysticseaport.org ). Puede aprovecharse como escapada de un día o quedarse una noche en alguno de los pintorescos hoteles y bed & breakfast de estilo colonial de la zona (desde US$ 130 por día).
Estados Unidos. Antes de aprender a deletrear dólar, los niños ya saben que existe Disney (paquete de 7 días en Orlando, 3 en Miami, auto y aéreo, US$ 3900 por persona). Pero desde allí nos llegó lo que una madre consideraba la mejor opción para chicos en el país del Norte: Washington D.C. y Williamsburg. En la capital norteamericana (aéreo, desde US$ 917; pase de dos días en colectivo, US$ 43; www.dctours.us ) es posible aprender sin darse cuenta en sus fascinantes Smithsonian Museums (gratis, www.si.edu ) todo lo que puede llegar a saber en una vida: 19 museos, 9 centros de investigación y un zoológico. El preferido de los chicos suele ser el del Aire y el Espacio, que reproduce las naves y los aviones que hicieron al hombre volar, con interpretaciones y actividades interactivas. A sólo unos kilómetros, en Williamsburg (pase adulto de dos días, US$ 48; www.williamsburgtours.net ) viajar por un rato al siglo XVIII.
Africa ¡¿Africa?! (pasaje de avión desde US$ 1100 con impuestos). Así es, Sudáfrica se está afianzando como destino seguro, de amplios servicios y pleno de curiosidades. El reparo del precio se compensa con los resultados que logran sorprender a un niño que cree haberlo visto todo. Un paquete que incluye Johannesburgo, el Parque Kruger y la Ruta Jardín, que va de Port Elizabeth a Ciudad del Cabo (10 días con aéreo, alojamiento y excursiones puede costar alrededor de US$ 2500, por persona; www.gardenroute.co.za ). Si el bolsillo lo permite, adentrarse en el Parque Shamwari (desde US$ 700 por persona por día, con todo incluido; www.shamwari.com ).
Y si no es para el Día del Niño, a no desesperar. Total, ¿cuánto falta para el Día de la Madre?
Por Encarnación Ezcurra
Para LA NACION