Río Negro:Aun en invierno, el golfo San Matias destila vida marina

Pueden verse ballenas, delfines, pingüinos y otros.Las excursiones de avistaje náutico son un éxito.La belleza que caracteriza al Golfo San Matías no se toma vacaciones, y aunque algunos asocien el…

esplendor del paisaje y la magnificencia del mar con la temporada estival, durante el invierno también pueden disfrutarse paseos embarcados que permiten maravillarse a cada paso con la diversa fauna marina que habita en el lugar.

A través de las excursiones náuticas que ofrecen dos firmas que operan en la zona es posible darse el lujo de tomar contacto con estas postales, que se suceden a medida que el semirrígido abordado se interna en la Bahía San Antonio, en un viaje que parte desde esta villa portuaria y permite curiosear desde el interior del mar aquellas imágenes que sólo pueden atesorarse dejando atrás los escenarios habituales.

Ya en los primeros bancos de arena que asoman bordeados por la espuma del oleaje, una gran cantidad de lobos marinos irrumpen ante los ojos de los extasiados pasajeros. Al seguir con la mirada el vuelo de las gaviotas, albatros y cormoranes, se encuentran de pronto con el despliegue de esos simpáticos personajes, que ajenos a la atención que reciben siguen disfrutando del tímido sol invernal.

Un poco más adelante, son los delfines nariz de botella los que quiebran la quietud del paisaje, anunciando su presencia con una lluvia de vibrantes gotas que, momentos después, enmarcan las gráciles piruetas que enseñan al alejarse. Saliendo de la Bahía, el paseo adquiere tintes diferentes, porque la enorme cola de un ejemplar solitario de ballena franca emerge entre el vaivén del agua para despertar el entusiasmo de todos, que, un poco más allá, distinguen la presencia de un pequeño ballenato que se desliza junto a su madre.

 

Precoz aparición

Si bien la presencia de estos cetáceos es más numerosa en la zona durante los meses de agosto y septiembre, sus anheladas visitas ya comienzan a despertar el interés de vecinos y turistas, que pudieron entrever por estos días su lejana presencia desde algún punto de la costa, o, en este caso, disfrutar de su aparición durante un recorrido por mar.

Antes de regresar a su punto de partida, la embarcación se acerca a la zona de Las Grutas, desconociendo que la travesía culminará con otra sorpresa. (Ver recuadro)

Durante el recorrido, acompañado en forma permanente por el vuelo de las gaviotas que parecen guiar el derrotero de la nave, un pequeño grupo de pingüinos aparece surcando la espuma, emergiendo entre la blancura de la sal para desaparecer luego entre las vibraciones cada vez más intensas del oleaje, que se encrespa de pronto alentado por el viento.

A la hora del retorno, el mar se muestra completamente sosegado, como si permaneciera ajeno al despliegue de vida que colmó las pupilas de los que se animaron a descubrir sus secretos, que quedaron a la espera de nuevos visitantes.

Fuente:www.rionegro.com /(ASA)

Deja una respuesta