
El ecosistema del río Paraná sumó, al menos de manera temporaria, un nuevo invitado: el ñacurutú, una especie de lechuza gigante que se instaló en las islas frente a la ciudad luego de la gran proliferación de roedores que se registró en la zona por la crecida del último otoño. Así lo demostró un usuario de Rosario3.com, que envió fotos e información de las aves.
“Después de la invasión de ratas que azotó a nuestra zona de islas, el río se recupera y se nota la abundancia de alimentos que hubo para algunas especies predadoras, que se reproducen en cantidad y buen estado de salud debido a que las quemas de pastizales no ha sido importante este año, evitándose la asfixia de los pichones en los nidos”, explicó Mauricio Leo en su mensaje.
Contó además que “esta especie de ave –el búho más grande que hay en la Argentina– antiguamente pertenecía al espinal entrerriano pero, a causa del desmonte y la sojización que sufre nuestra vecina provincia, se ha adaptado a los ambientes de islas y ha nidificado en varios lugares frente a nuestra ciudad”.
“Se ve que la superpoblación de ratas le ha venido muy bien para alimentar a sus pichones”, observó el lector, y recordó que “los humedales son maravillosas fuentes de riqueza natural y biodiversidad”.
Además, compartió un blog con una publicación sobre la última salida del Club de Observadores de Aves Federal Rosario, en la zona de islas, donde se avistaron las lechuzas.
Fuente:(Periodismo Ciudadano/Mauricio Leo)www.rosario3.com