Terminada la contienda armada de la segunda guerra mundial, las naciones del mundo, comenzaron la reconstrucción de sus relaciones en el marco de un nuevo orden mundial. Los países, a los que se los denomino Occidentales desarrollaron la actividad turística, de modo tal de equipararla al desarrollo industrial, en la búsqueda de puestos de trabajo para sus poblaciones…
La evolución de la industria del ocio, trajo aparejada con el incremento de los ingresos de los ciudadanos de estas naciones, la demanda de nuevos y más variados servicios, para ser utilizados en una primera instancia en sus vacaciones anuales y a posterior por la creciente población de ciudadanos a los que les había llegado la hora de gozar de sus jubilaciones.
Se pusieron en valor, y ganaron espacios las actividades recreativas en las playas, las montañas, el visitar los monumentos históricos, los lugares donde se habían realizado descubrimientos arqueológicos, los museos, la vida rural como un regreso desde la vida urbana en las grandes ciudades, a la inicial vida en poblaciones rurales, la gastronomía en todas sus variantes, las artes, las geografías y manifestaciones humanas exóticas, las áreas geográficas salvajes.
Desde entonces al presente, millones de ciudadanos del mundo, lo atraviesan todos los días con diversos intereses de destinos, haciendo uso de una oferta de servicios turísticos, que abracan todas las posibilidades de ingresos económicos por parte de los viajeros.
Esto fue posible, a los avances tecnológicos que la humanidad en su conjunto a logrado y a la socialización de este bien, manifestado esto, en la baja de los costo del transporte de pasajeros, los pasajes aéreos, ferroviarios, terrestres en automotores de pasajeros, del transporte fluvial y marítimo. Los avances en las comunicaciones, la mayor producción de alimentos, la eficiente red de carreteras y caminos.
La accesibilidad económica a la compra de automotores por parte de todo el target de asalariados, permitió a las poblaciones desplazarse en forma autónoma por los territorios, demandando servicios gastronómicos, de alojamiento. En esencia Servicios Turísticos.
El desarrollo tecnológico, aplicado a la industria naval liviana, produjo su propia revolución.
Los medios de propulsión para las embarcaciones, se hicieron más confiables y de menor consumo, proponiendo sus fabricantes una oferta amplia, de bajas y altas potencias, lo que permitió contar con motores para todo tipo de embarcaciones.
La aplicación en la construcción de cascos navales de polímeros plásticos, redujeron sus tiempos y costos de construcción, aumentando su confiabilidad y reduciendo su mantenimiento posterior.
La posibilidad de dotar a las nuevas embarcaciones de los elementos de comunicación y posicionamiento global con precios accesibles, permitió aumentar la seguridad de la navegación en todas ellas, sin importar su tamaño o costo.
Satisfecha la oferta y demanda de automotores y las posibilidades de los ciudadanos de acceder a estos en una variación de modelos y prestaciones, los consumidores advirtieron que sus economías les permitían poder acceder a un nuevo bien, que se les ofrecía, como es una embarcación, que los ponía en un nuevo y novedoso plano de desplazamiento en la geografía y la posibilidad de practicar deportes nauticos en forma masiva, reservados en los inicios de sus prácticas a élites de altos ingresos.
El aumento de la flota naval deportiva en el mundo desde la terminación de la segunda guerra mundial a nuestros días, fue exponencial y con este aumento de embarcaciones, fueron exponenciales los servicios que esta flota y sus navegantes necesitaron y necesitan para llevar adelante sus actividades.
LA FLOTA DEPORTIVA EN LOS PAISES OCCIDENTALES (AÑO 2009)
Nación Población Renta per cápita $ N.º de embarcaciones Habitantes por embarcaciones
Canadá 34.030.589 39.600 2.900.000 12
U.S.A
313.232.044 47.400 21.000.000 15
Australia
21.766.711 41.300 1.700.000 13
N. Zelanda
4.290.347 28.000 300.000 14
Suecia
9.088.728 39.000 700.000 13
Dinamarca
5.529.888 36.700 250.000 22
Irlanda
4.670.976 37.600 80.000 58
Países Bajos
16.847.007 40.500 290.000 58
G. Bretaña
62.698.362 35.100 1.100.000 57
Francia
65.102.719 33.300 550.000 118
Alemania
81.471.834 35.900 600.000 136
Italia
61.016.804 30.700 500.000 122
Bélgica
10.431.477 37.900 80.000 130
España
46.754.784 29.500 46.000 1.016
Portugal
10.760.305 23.000 8.500 1.266
C.E.E.
492.387.344 32.900 3.450.000 143
Fuente: Consultora IBIS-Comunidad Económica Europea-2010
Es evidente la extraordinaria importancia del turismo náutico, como variable que permite y obliga a diversificar la oferta turístico-deportiva de Argentina, y del MERCOSUR, para desarrollar y captar una oferta mundial existente de deportistas-turistas, volcados a la navegación, que ya superan los 20 millones de nautas a nivel mundial, que parten de sus fronteras anualmente, en una tendencia creciente, similar al índice de crecimiento de la demanda de automóviles.
Turistas que son, sin lugar a dudas, los de mayor poder adquisitivo del planeta, y los más rentables, a la hora de pagar servicios.
En las “Jornadas Españolas de Turismo Náutico”, realizadas en el año 1978 se hablaba de los 10.500.000 embarcaciones en USA., una embarcación cada 20 habitantes (cifra duplicada) y más de 2 millones para la comunidad Económica Europea. Hoy Francia solamente, ha llegado en el 2010, ha superar el millón de embarcaciones registradas.
De la docena de Puertos Turísticos Deportivos existentes en el año 1978 en la costa occidental del Mediterráneo Europeo, para la rivera Francia, España, en la actualidad existe una oferta de una Dársena Deportiva o Refugio cada 7 millas náuticas de distancia entre ellos , y la oferta pese a la evolución de la actividad, sigue sin satisfacer la demanda.
Brasil, en su estrategia de crecimiento del sector turismo náutico- deportivo, ha manifestado en publicaciones del sector, la propuesta, de contar con servicios y amarras de recalada marítima, cada 50 millas náuticas sobre sus costas.
Uruguay, viene trabajando intensamente en la oferta de servicio para embarcaciones deportivas, servicios que en la actualidad tiene como principales consumidores, a las embarcaciones y tripulantes de la flota de embarcaciones deportivas de nuestro país.
Los argentinos históricamente, vivimos de espaldas al recurso que nos brinda nuestro litoral fluvial y marítimo.
Son pocos los servicios con los que disponemos en el litoral fluvial y marítimo para la flota nacional de embarcaciones deportivas.
Las más de 2000 embarcaciones deportivas de diferentes banderas que año a año navegan nuestro Mar Argentino con rumbo a la Tierra del Fuego, la Antártida, los Canales Fueguinos, observan la imposibilidad de contar con recaladas y servicios a lo largo de la extensa costa Bonaerense, y patagónica, forzándolos a enfrentar el temido Atlántico Sur en largos días de navegación, sin poder disponer en su derrota, de puertos que les permitan hacer un alto, abastecerse y visitar nuestros puntos de interés turísticos.
Destinos desarrollados y promocionados en el mundo entero, como atractivos de alto interés a ser visitados, dotados de servicios de excelencia y cercanos a los posibles puertos turísticos-deportivos, a establecerse en la costa atlántica: Mar del Plata, Pinamar, Necochea, Bahía Blanca, San Antonio Este, Puerto Madryn, Camarones, Comodoro Rivadavia, Caleta Olivia, Deseado, San Julián, Santa Cruz, Río Gallegos, Río Grande y Ushuaia.
La creciente flota turístico-deportiva de los Estados Unidos, Canadá, Brasil y otras, observan como destino, de mediano plazo natural desplazarse a los países y mares del Sur.
La flota de la C.E.E a tenido como destino en el último año los puertos del Mar Adriático, visitando y recalando en las costas Croatas, Eslovenas y Albanesas en donde fuertes inversiones de capital se han realizando en obras de puertos turísticos deportivos, que la atraen. Su cuantía en números, y calidad de embarcaciones, nos permite observar, que superadas las crisis económicas, las embarcaciones de mayor porte, tendrán indefectiblemente como destino los mares del sur y los atractivos turísticos que los países ribereños les ofrecen, arribando a ellos por un medio de transporte no masivo ni tradicional, como lo es, la propia embarcación.
El desarrollo de servicios portuarios para estas embarcaciones y viajeros de alto nivel adquisitivo, nos obliga a pensar en nuestra flota de embarcaciones turísticas deportivas, que en un número cercano a las 200.000 registradas, en la actualidad no se le ofrece la posibilidad de contar con una red de servicio de recalada y amarras temporarias, que les permitan navegar y planificar derrotas, hacia los destinos turísticos que en las riberas de los ríos interiores y costas marinas de nuestro existen.
Es, pues, imprescindible crear una infraestructura portuaria, destinada a la actividad turística-náutica que tengan una adecuada oferta de servicios, sobre la que pueda proyectarse un crecimiento natural de la actividad, integrando una red planificada de puertos, que tengan como objeto principal recibir embarcaciones turísticas, en su necesidad de recalada, descanso y esparcimiento de sus tripulantes, en sus navegaciones hacia destinos turísticos, a los que se puede llegar desde los ríos y los mares de nuestra patria.
Desarrollos portuarios, turísticos-deportivos, que como se manifiestan en las costas del Mar Báltico, de los mares del Océano Mediterráneo, de las costas de la península de La Florida y de California en los Estados Unidos, se convierten en plataforma de muy buenos negocios, generadores de puesto de trabajo de buen nivel remunerativo.
Existen en Argentina tres espacios geográficos potenciales para pensar en adecuarlos para el desarrollo del Turismo Náutico:
1 – Los más de 5.000 Km . del litoral marítimo Argentino (Provincias de Buenos Aires, Río Negro, Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur)
2 – Los ríos navegables del Litoral Fluvial Turístico Argentino (Provincias de Buenos Aires, Entre Ríos, Santa Fe, Corrientes, Chaco, Formosa, Misiones, Rio Negro y La Ciudad Autónoma de Buenos Aires,).
3 – Los demás espacios acuáticos navegables: Lagos y lagunas interiores, embalses, y ríos interiores afluentes del sistema de lagos, lagunas y embalses.
La puesta en valor de nuestros ríos y nuestro mar, como vías de comunicación y de transporte hacia destinos turísticos, garantizando al navegante, seguridad en la navegación y una red de servicios homogéneos, y con justiprecios, animara a una mayor cantidad de Argentinos a adquirir una embarcación liviana para poder disfrutar de ella, ya no solo para la práctica de un deporte náutico o un paseo corto, sino como el medio de transporte que lo acercara, en sus periodos de descanso, a utilizarla para llegar a sus destinos turísticos, haciendo del viaje, parte del leitmotiv del ocio a disfrutar.
El 20 de Septiembre, se Anuncio en el Auditorium del Ministerio de Turismo, la realización, dentro de las actividades de la ´´Semana de la Soberanía Nacional” del primer Congreso Internacional de “Turismo Náutico” a desarrollarse en la ciudad de San Pedro, los días 24 y 25 de Noviembre del 2011. Auspiciado por, Municipalidad de San Pedro, Ministerio de Turismo de la Nación, Ministerio de la Producción de la Provincia de Bs as, Subsecretaria de Actividades Portuarias de la Prov. de Bs As., Secretaria de Turismo de la Prov. de Bs As. Ministerio de Economía de la Nación a través de la DINAPREI