La informacion la publicó el Diario El Pais de España el 1º de enero 2011.»La flota arponera japonesa inicia la campaña en la que pretende cazar 1.000 cetáceos»…
La foto es de hoy mismo. La imagen, sin embargo, refleja la ya conocida lucha para salvar a las ballenas de la voracidad de la flota pesquera japonesa, que caza cetáceos con la excusa de la investigación científica y la realidad del negocio alimenticio y de la cosmética. Esta vez en el Antártico.
La fotografía ha sido distribuida por la organización Sea Shepherd Conservación Society y muestra como el ballenero Yushin Maru que cazaba junto a sus arponeros gemelos Yushin Maru #2 y Yushin Maru #3, repele con cañones de agua el acoso de una motora neumática de la Sea Shepherd, una sociedad multimillonaria especialmente agresiva en su combate por la preservación de los mares. La persecución se ha desarrollado entre témpanos de hielo, en el Antártico Sur, a 1.700 millas al sureste de Nueva Zelanda. La esperanza de los conservacionistas es intentar impedir o al menos reducir la campaña ballenera, en la que la flota ballenera prevé matar 1.000 ballenas. En las tareas de localización y acoso a la flota japonesa participa también el helicóptero de la organización bautizado como Nancy Burnet. Los tres buques japoneses intentaron bloquear e incluso abordar, según los conservacionistas, a los barcos de Sea Shepherd Steve Irwin, Bob Barker y Gojira, que se habían lanzado a la caza del barco factoría Nisshin Maru, donde las ballenas son despedazadas y congeladas. «Si nos persiguen no cazan ballenas», ha asegurado el capitán de la campaña de la Sea Shepherd, Paul Watson. No ha habido heridos, pese al fuego cruzado de especial violencia.