Estudian incentivos en las tarifas; voluntarios limpian la ciudad afectada por la caída de cenizas provenientes del volcán Puyehue, comenzó a pensar en la jugada para el día después…
Con una afección mucho menor que la de la vecina Villa La Angostura, la ciudad, que recibe 250.000 turistas cada temporada invernal, pretende recuperar lo antes posible su fisonomía sin cenizas y comienza a diseñar un plan para la recuperación del turismo, clave para la economía local.
Por decreto de la gobernación de Río Negro, la semana pasada se declaró el estado de emergencia económica y social en las regiones afectadas por el avance de las cenizas, como la Zona Andina y la Región Sur, y se evalúa sancionar leyes de exención impositiva y beneficios para el turismo y la producción.
Bariloche tiene garantizados sus servicios básicos y profundizó en los últimos días tareas de limpieza incluso con grupos de vecinos voluntarios que, por medio de la red social Facebook, se congregaron para embellecer la ciudad a las puertas de una nueva temporada invernal.
El ministro de Turismo de Río Negro, Omar Contreras, se mostró auspicioso con la pronta recuperación del turismo en Bariloche y calificó que «el peor evento [que golpeó a la ciudad turísticamente] fue la epidemia de gripe A, porque se desconocía absolutamente todo sobre la enfermedad y conllevaba un considerable índice de mortalidad».
Paquete de medidas
Paralelamente, el intendente barilochense, Marcelo Cascón, anunció la conformación de un equipo de trabajo junto a las cámaras empresariales vinculadas con el sector turístico para idear una serie de medidas. Concretamente, se busca «afrontar la caída de parte de la temporada de turismo, acompañar la cuestión social ante eventuales bajas en el trabajo y buscar alternativas de incentivo para cautivar a los turistas».
Según se informó, se busca que los Estados nacional y provincial respondan a estas demandas con planes de ayuda financiera, aunque, hasta el momento, de los 2,4 millones de pesos anunciados por ambos gobiernos, sólo llegaron a Bariloche 300.000 pesos.
El sector privado aportaría una contraparte para volver a «hacer atractivo el destino» con el congelamiento de precios y promociones en tarifas y servicios al turista.
Pese a que el aeropuerto local continúa cerrado, la reactivación comenzó a evidenciarse de a poco con el arribo de tres ómnibus chárter de turistas y la puesta en funcionamiento de la excursión lacustre a Puerto Blest. Además, se esperan para después del fin de semana largo los primeros contingentes estudiantiles provenientes de Mar del Plata y Uruguay. Los operadores turísticos estiman que el turismo estudiantil será precisamente el que menos sufrirá los efectos de las cenizas, ya que la mayor parte de los viajes se encuentran contratados con meses de anticipación.
Fuente: www.lanacion.com.ar