Los fieles católicos de toda la Patagonia recuerdan EN ESTA FECHA el día del patrono San Juan Bosco, que tras su muerte se convirtió en el santo de la juventud, los obreros, la alegría y María Auxiliadora. El patrono de la Patagonia, nació el 16 de agosto de 1815 en I Becchi (Piamonte, Italia) de padres muy humildes. Desde niño trabajó duro en diversos oficios. De su madre, Margarita, recibió una profunda educación cristiana y un gran amor a la Virgen María. San Juan Bosco se ordenó sacerdote en 1841…
ÂÂ En sus primeras actividades sacerdotales dio amparo y educación a niños y jóvenes que estaban abandonados por las calles. Un Ave María hizo el milagro y el comienzo de una cadena de oratorios. Su sistema preventivo se basó en el amor, la razón y la religión, por lo que revolucionó la pedagogía de la época. En 1859 fundó la Institución Salesiana, y en 1872 con María Mazzarello –las hijas de María Auxiliadora– creó la Pía Unión de Cooperadores Salesianos. En 1879 San Juan Bosco cumplió uno de sus mayores sueños, cuando envió a sus primeros misioneros a la Patagonia. El santo patrono murió el 31 de enero de 1888. , en este nuevo aniversario les envió una breve semblanza de la obra salesiana y de su fundador que para ser justos conviene rescatar.
Desde 1848 pensó enviar sacerdotes a evangelizar la Patagonia. Fue invitado a disertar sobre la misma en la «Sociedad Geográfica de Lyon», y dejo deslumbrado a los presentes, por el conocimiento que tenia de esta parte Argentina. «El 14 de diciembre de 1875 llega a Buenos Aires el primer grupo de salesianos, encabezados por monseñor J. Fagnano y Juan Cagliero. «Roca, en su expedición de 1879, llevaba capellanes salesianos, que intercedieron como nadie, para el trato con los originarios. El 26/3/1876 se funda el primer colegio salesiano: preparando la mira al sur, en San Nicolás de los Arroyos.
El recordado historiados Argentino, «Ygobone en 1946 menciona la fundación en Patagonia de tres colegios secundarios, cuatro de artes y oficios, tres de educación agrícola y 17 primarios. En cuarenta años asistieron 81.870 alumnos. «Además, los Salesianos, fundaron: 38 iglesias o parroquias, 2 hospitales, 2 museos regionales, 5 estaciones meteorológicas y la Universidad de la Patagonia ´San Juan Bosco´ hoy Nacional en Comodoro Rivadavia. Desde fin del Siglo XIX «Ceferino Namuncurá, hijo del cacique Manuel Namuncurá, fue educado a requerimiento de su Padre Manuel, desde muy niño por los salesianos y su quillango está en el Vaticano. «Don Juan Bosco no visitó jamás la Patagonia. No obstante soñaba frecuentemente con ella, al punto de haberse escrito aproximadamente 200 páginas de dichos sueños acaecidos en 1854, 1872, 1881, 1883, 1885.
A pesar de muchas imprecisiones e interpretaciones fantasiosas, cabe destacar que en la noche del 30 al 31/8/1883 soñó la existencia de petróleo en la Patagonia 24 años antes de que se descubriera; el sueño mostraba cómo sería la realidad después de 2 generaciones de 60 años cada una, a partir de 1880. Y se veía quizás entre la latitud de los paralelos del 42 al 47 una gran ciudad que no existía en 1883, cuando sólo Punta Arenas y Carmen de Patagones existían. Corresponderá la visión a la futura ciudad de Comodoro Rivadavia, Puerto Madryn, o cualquier otro estratégico, enclave». En otro de los sueños proféticos de Don Bosco, luego de una especie de cataclismo surgía del globo terráqueo una bandera en el territorio patagónico que desconociéndola el santo después de buscar en un atlas la identificó como la bandera de la República Argentina. Luego también desde Turín otro salesiano, el padre Stefenelli, soñaría con el territorio del Alto Valle del Rio Negro y con plantaciones de alfalfa sin presentir que luego se concretaría en otra realidad, EN UVAS Y FRUTAS DE CAROZO. Entre estos apóstoles de la obra salesiana en la Patagonia deberíamos citar a monseñor José Fagnano, «el capitán bueno» como lo llamarían los originarios “onas” ; al padre Domingo Milanesio que supo misionar por Valcheta y “línea sur”; al padre Bernardo Vacchina y al ya mencionado Stefenelli; al «ángel del Colorado», el padre Pedro Bonacina; al padre José María Brentana reconocido en el Alto Valle de Río Negro y Neuquén; el padre Miguel Borghino, «ligado al progreso de Bahía Blanca»; al padre «dotor» Evasio Garrone; el Padre Juan Muzio, positivo e insistente colonizar de parte del Chubut y más recientemente los padres Marcelo Gardín, Constantino Saez, Francisco Calendino; y los relacionados con la cultura y la investigación: los padres Raúl Entraigas, Pascual Paesa, Juan Belza, Domingo Salvo, Antonio Fernandez, José Beauvoir, Maggiorino Borgatello, Pedro Giacomini, Lorenzo Maza, Luis Pedemonte de Chubut al Rio Colorado y los casi contemporáneos Monseñor De Nevares, Moseñor Perez, Monseñor Aleman , Ernesto Szanto, Oscar Barreto, Alberto Dumrauf, Martínez Torrens, Jaime Belli, y el Padre Corti entre otros. El padre Juan José del Col en un medular esbozo historiográfico escribe que «la Patagonia vio florecer a Ceferino Namuncurá ´el lirio de la Patagonia´ y a Laura Vicuña ´la azucena de los Andes´», siendo también de cuño patagónico la santidad del enfermero de los pobres Dn. Artémides Zatti, «el pariente de todos «.
Hoy se puede decir que los sueños de Don Bosco han cristalizado y sin duda su nombre y su obra estarán cada vez más íntimamente ligados a los Patagonicos, esta «región de la aurora austral» como la definiera el padre Raúl Entraigas.